El punto de partida Es habitual que el emprendedor digital se enfrente a su proyecto con altas dosis de ilusión, motivación y creatividad, pero también con un gran desconocimiento de muchos aspectos sobre la gestión empresarial y sobre cómo poder conseguir estabilizar el negocio más allá de su lanzamiento.
Uno de los mayores errores que suele cometer una empresa digital en su estrategia de marketing es la búsqueda de resultados inmediatos. Y, si no funciona, pues a otra cosa. Otro de los problemas reside en por dónde empezar: no se trata de hacer un plan, se trata de realizar un proyecto que recoja diferentes focos de trabajo. A continuación, detallaré los 5 ejes que considero vitales, donde poner empeño y recursos para lograr una óptima evolución y conseguir objetivos en cualquier empresa digital.
La comunicación visual es un valor al alza en un mundo hiperconectado y multicanal donde la inmediatez y la velocidad del cambio es una constante. Gracias al móvil y la tecnología, se producen millones de interacciones y conversaciones con una rapidez increíble. Los soportes visuales, ya sean imágenes, gif animados o vídeos, continúan aumentando. Al mismo tiempo, en los negocios es cada vez más frecuente el uso de herramientas visuales que facilitan las conversaciones y las tomas de decisiones.
Con el paso de los años el desarrollo de software ha ido evolucionando. Cada vez es más común que las empresas, a la hora de abordar el desarrollo de nuevos productos o servicios, opten por aplicar la llamada metodología agile. Los proyectos “llave en mano” (soluciones cerradas que se desarrollaban siguiendo metodologías tipo “waterfall”) han ido dando paso a proyectos que se van construyendo poco a poco, que son pensados no tanto como productos finales sino como conjuntos de funcionalidades.