Marketing social: Cómo aplicarlo dentro de tu estrategia de afiliación
Marketing y Comunicación | Artículo-
Visitas3412
- Febrero 2019
- Fecha de publicación
- Febrero 2019
- Marketing y Comunicación
- Artículo
_ESIC Business & Marketing School
ESIC Business & Marketing School.
En marketing social, como disciplina que impulsa no sólo el bienestar cortoplacista del consumidor, sino también el largo plazo de la sociedad, encontramos diversos tipos de afiliación. Entre ellos destacan los charity publishers, cuyo modelo de negocio está basado en este tipo de marketing.
Estos sites se caracterizan porque, más allá de promover la compra de productos y servicios de diferentes marcas, su objetivo es que las personas tomen parte activa en asuntos de índole social. Encontramos el ejemplo de helpfreely.com, que incluye una comisión solidaria por cada compra realizada por parte de un usuario registrado.
Así pues, los afiliados solidarios son empresas que funcionan como una fuente más de ingresos para una o varias organizaciones no lucrativas del Tercer Sector.
Se trata, por lo general, de una comunidad de usuarios denominada “colectivo” que donan el incentivo económico que reciben por cada compra realizada a través de este site a una o varias entidades sin ánimo de lucro.
De esta forma, los afiliados caritativos cumplen una triple función dentro del marketing social:
– Cubren los deseos de compra de los consumidores que ven incentivada su compra al dotarla de un valor social.
– Aportan servicio a las empresas que ven incrementadas sus ventas y además adquieren una imagen de compromiso social.
– Generan interés social sirviendo como fuente externa de ingresos a las ONG´s.
Pero, ¿Cómo integramos el marketing social en la estrategia de afiliación? H2
Para poder entender cómo encaja el marketing social dentro tu estrategia de afiliación, debemos aclarar primero qué es el marketing de afiliación.
Aunque todas las opciones tienen cabida, el core business del marketing de afiliación es el marketing de resultados, es decir, la promoción y ejecución de campañas a CPL y CPA.
Tres son los actores implicados en esta colaboración comercial:
- El anunciante: cuyo objetivo es vender sus productos o servicios al usuario final a través del canal online. Remunera al afiliado con un % de cada venta realizada por un usuario que proceda de su site.
- La plataforma de afiliación: como intermediaria de este proceso, aporta la tecnología para medir los resultados y sirve como punto de encuentro entre la marca y los miles de afiliados adheridos a la red.
- El afiliado: son aquellos espacios publicitarios que promocionan los productos del anunciante a través de enlaces de texto, banners o newsletters. Es aquí donde situaríamos a los charity publishers.
Pongamos un ejemplo: Una tienda online de animales quiere poner en marcha su programa de afiliación para activar otras fuentes de tráfico que redirijan a su página web y, por tanto, que le hagan incrementar sus ventas.
Se desarrollaría en base a unos pasos básicos:
- La red de afiliación cuelga en su plataforma las creatividades y los trackings del anunciante.
- La red comunica a todos los afiliados de la red las características del nuevo anunciante, así como la comisión que se llevará el afiliado por cada venta que proceda del tráfico su site.
- Afiliados de todos los verticales deciden si les interesa o no adherirse a ese programa de afiliación.
Asumamos que, dentro de toda la tipología de afiliados, los charity publishers solicitan tener acceso a los materiales y los trackings de la campaña.
El anunciante decide entonces si encajan o no con su marca y valora la aportación a su estrategia de marketing social. Si las partes están de acuerdo, podríamos iniciar la colaboración entre ambos.
El charity publisher implementaría la oferta en su web y comenzaría a promocionar la marca informando al usuario de que, al comprar a través de sus enlaces, podrá destinar un % del valor de la compra a alguna de las ONG´s vinculadas con el site.
Así, el usuario hace click en el enlace del afiliado, se le redirige a la web del anunciante y realiza su compra.
Una vez se verifique que ese pedido se ha completado, el anunciante paga la correspondiente comisión al publisher que, a su vez enviará el correspondiente incentivo económico a la entidad social elegida por el usuario.
Con todo esto podemos concluir que el marketing social se puede hacer con pequeños gestos e incluso con pequeñas colaboraciones.
Una estrategia de marketing social no tiene por qué suponernos destinar un presupuesto extra para poder llevarlo a cabo, sino que puede estar englobada dentro de otras estrategias de marketing como es la afiliación.
¿Quieres aprender a aplicar el marketing digital en el área de healthcare con éxito? Fórmate con el Postgrado online en Marketing Digital de ESIC.
También te puede interesar
Team building: qué es y cómo podemos implementarlo en una empresa
Los empleados son la estructura de cualquier empresa. Sin ellos, el negocio no saldría adelante, motivo suficiente para tener departamentos encargados tan solo de buscar estrategias para que los empl...
- Publicado por _ESIC Business & Marketing School
Qué es el modelo zero trust y cómo ayuda a mejorar la seguridad de tu empresa
La pandemia de covid-19 supuso un antes y un después en el funcionamiento de las compañías. La sociedad al completo se vio obligada a trabajar desde casa, lo que hizo que las empresas tuvieran que ...
- Publicado por _ESIC Business & Marketing School
Dirección estratégica: qué es, para qué sirve y ejemplos
¿Vale todo el mundo para dirigir una compañía? Ser ambicioso y querer ascender en una empresa es, por supuesto, algo positivo y gratificante. Pero ¿qué ocurre cuando muchas personas llegan al pun...
- Publicado por _ESIC Business & Marketing School