Employer Branding: ¿Qué es y cuál es su significado en RRHH?
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- octubre 2022
- Fecha de publicación
- octubre 2022
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Licenciada en Derecho y especializada en Derecho Laboral, he desarrollado mi trayectoria profesional como generalista en departamentos de RRHH, en los últimos 16 años en la farmacéutica americana Bausch and Lomb, y como Directora de RRHH para España y Portugal desde hace 8 años
¿Qué es el employer branding?
¿Podrías atraer el talento a tu organización sin mostrar a los candidatos la cultura, los valores o la reputación de la compañía? Situar a la empresa como marca empleadora de referencia es clave para atraer y retener al mejor talento. El employer branding es precisamente eso: darle valor a nuestra marca con coherencia, con una propuesta real y diferenciándote del resto; es la suma de un conjunto de iniciativas de atracción, compromiso y retención destinadas a mejorar la reputación que tiene una organización como empleadora.
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Jeff Bezos, fundador de Amazon, dijo: «Tu marca es aquello que dice la gente sobre ti cuando sales de la habitación». El employer branding será lo que piensen y digan sobre nuestra marca cuando nos consultan como empresa, cuando se menciona o aparece nuestra marca.
La estrategia es clara: atraer el talento externo y retener el talento interno; por eso es fundamental que lo que tu marca proyecte tenga coherencia con la misión, la visión y los valores de tu compañía, que lo que sienten sus empleados sea lo mismo que percibe el talento que quiera formar parte de ella. Lo que nos hace excepcionales como empleadores será la propuesta de valor de la compañía.
¿Qué importancia tiene en nuestra propuesta de valor?
¿Por qué es tan importante construir un employer branding de éxito? Porque nos ayudará a atraer talento externo y fidelizar el talento interno, incrementar el sentimiento de orgullo de permanencia y, por tanto, el compromiso de los empleados, reduciendo la rotación y la fuga de talento. Fortalece la cultura corporativa al ser una transmisora de esta; aumenta el prestigio y reputación de la organización, entre otros muchos más.
¿Y por dónde empezamos? Lo primero que tenemos que hacer es diagnosticar y analizar nuestro posicionamiento como marca: ¿está alineado con la realidad?, ¿refleja lo que realmente somos?, ¿está reconocido?, ¿somos visibles? Una vez que sepamos de dónde partimos, tenemos que definir cuál es nuestra propuesta de valor: ¿qué nos diferencia del resto?, ¿qué aportamos para merecer ese reconocimiento?, ¿qué sentirán cuando entren a formar parte de la organización?, ¿compartimos los mismos valores?
Con las respuestas, ya tenemos clara nuestra hoja de ruta; con cada pregunta daremos contenido a nuestra propuesta de valor y estaremos preparados para promoverla. Hacerla visible es fundamental: si no lo mostramos, si no lo enseñamos, de nada sirve. Saber dónde y cómo difundirla es fundamental para que tu valor de marca llegue y cale tanto en el talento externo como en el interno. También es esencial definir los canales a los que dirigirás tu marketing de marca, así como medir y monitorizar su impacto: ¿nos está resultando más fácil atraer a los candidatos?, ¿conocen tu marca cuando los contactas?, ¿los empleados identifican lo que viven con lo que promueves? Estos serán algunos de los KPI que deberemos medir.
El employer branding como vía para atraer talento
El mundo está cambiando a pasos agigantados en todos los ámbitos y la atracción de talento no se queda atrás. En el pasado, las organizaciones seleccionaban a los candidatos; con la demanda actual, la exigencia del candidato y la fuerte competencia le están dando la vuelta a la situación y ahora es el talento quien selecciona de forma muy cuidadosa y exigente dónde quiere desarrollarse, dónde quiere estar. Por eso, no podemos quedarnos en una simple publicidad de nuestra marca, sino que debemos ser capaces de ofrecer una propuesta de valor que nos diferencie del resto, que refleje nuestro ADN organizativo, nuestros valores, nuestra misión, nuestra aportación y, sin duda, debemos saber involucrar a nuestro mejor embajador, aquel que mejor conoce la marca porque la vive día a día, es decir, el talento interno que apuesta por nuestra propuesta, que cree en ella y que se enorgullece de formar parte de ella.
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