¿Qué es el diseño de interfaces web?

¿Qué es la interfaz de una web?

Interfaz web es el nombre que se utiliza para referirse a la estructura diseñada en cualquier aplicación web y que le permite al usuario acceder a los contenidos de dicha web cuando esté navegando. También se puede designar como interfaz de usuario o por sus siglas en inglés como GUI (graphical user interface). La interfaz utiliza un conjunto de componentes visuales (imagen o texto), interactivos (botones, casillas, cuadro de desplazamiento, controles) y de diseño para representar la información y acciones disponibles. Su principal uso consiste en proporcionar un entorno visual sencillo para permitir la comunicación con el sistema operativo de un ordenador o dispositivo móvil.

Las interfaces de usuario son un concepto mucho más moderno que el ordenador en sí. No es hasta la década de los 80’ cuando se lanza el primer ordenador comercial con una interfaz de usuario, la Xerox Star 8010. En 1983 presentan la Apple Lisa, que pese a ser un fracaso comercial, costaba 10.000 dólares de la época, sí que sentó las bases del diseño de interfaces de usuario moderno, introduciendo elementos que han llegado hasta nuestros días como la barra de menús y los controles en las ventanas. 

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Tipos de aplicaciones de una interfaz de usuario

Navegador web:

Cuando el usuario visita la url del sitio web al que quiere acceder, éste se abre en un navegador que carga las instrucciones creadas en un lenguaje de programación lo que genera los elementos visuales de la página que permitirán al usuario interactuar con los contenidos de la misma. 

Móvil:

En la actualidad “mobile first” es la norma. Esto quiere decir que las interfaces se diseñan y se desarrollan pensando primero en el consumo de contenidos en el móvil. Hoy en España el 78% de las personas acceden a los contenidos digitales a través de su smartphone y tienen una media de 36 apps descargadas (‘Estudio Mobile & Conectividad Inteligente 2021’ de IAB Spain).

Software:

Como por ejemplo las interfaces que se utilizan para aplicaciones de correo electrónico como Microsoft Outlook. La usabilidad en este tipo de interfaces es la clave del éxito ya que como veremos a continuación facilitar la experiencia de usuario es la meta que persigue un buen diseño de interfaces. 

¿Qué criterios se deben tener en cuenta a la hora de hacer un buen diseño de interfaz de una web?

Menos es más es la máxima que podríamos aplicar a la hora de diseñar una interfaz de usuario. Esto no quiere decir que no podamos hacer una propuesta compleja y arriesgada pero es importantísimo siempre pensar en el usuario y que su experiencia de uso sea amigable e intuitiva, por eso la usabilidad es la clave de un buen diseño de interfaces web.

Una buena interfaz de usuario debería explicarse por sí misma y que de forma natural vaya guiando al usuario en el camino que deseamos, sea cuál sea el objetivo que nos hayamos marcado, debemos diseñar una interfaz que sea tan fácil de usar, que la experiencia de uso sea agradable a la vez que eficiente. ¿Cómo conseguimos esto? Situando al usuario desde el principio en el centro de nuestro diseño y siguiendo estas recomendaciones.

Claridad:

Los elementos de diseño deben ser claros, estar distribuidos de forma clara y que su organización sea natural para el usuario. Algunos elementos básicos que suelen incluir la mayoría de interfaces web son los menús de navegación, las ventanas, el contenido gráfico, el cursor, sonidos y en general, todos aquellos canales por los cuales se permite la comunicación entre el ser humano y la computadora. 

Simpleza:

Se deben buscar referentes próximos al usuario para que pueda decodificarlos a simple vista. Elementos con los que esté familiarizado y le resulte cómodo relacionarse.

Flexibilidad:

Los diferentes componentes deben estar organizados sí, pero al mismo tiempo ser flexibles para adaptarse a las diferentes experiencias de uso y situaciones que puedan surgir durante la navegación sin perder la estructura clara.

Funcionalidad:

Nunca hay que perder de vista el objetivo con el que se esté diseñando la interfaz para crear y distribuir los diferentes elementos en vistas de la consecución de dicho objetivo. 

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