Concepto, requisitos y ejemplos de una empresa familiar

En términos generales, se considera que una empresa familiar es la compañía que funda, gobierna y controla una unidad familiar. Sin embargo, y desde un lado más purista, son varios los requisitos que han de cumplirse para que consideremos que una empresa es familiar:

REQUISITOS NECESARIOS PARA CONSIDERAR UNA EMPRESA COMO FAMILIAR 

• Los miembros de la familia han de poseer la mayoría de las acciones 

• La organización ha de ser dirigida por propietarios y fundadores 

• Mantiene una estrategia de continuidad para la siguiente generación 

• Si cotiza en bolsa, los fundadores han de poseer derecho de voto 

• Ventajas fiscales dependiendo de la comunidad autónoma 

Los miembros de la familia han de poseer la mayoría de las acciones 

Uno de los requisitos fundamentales es que los miembros de la familia o familias que fundaron la compañía han de poseer la mayoría de las acciones o del capital social y, por tanto, de los votos. La mayoría de esos votos deben ser directos o indirectos. 

La organización ha de ser dirigida por propietarios y fundadores 

La organización ha de ser gestionada y dirigida, al menos, por uno de los propietarios y fundadores anteriores. 

Mantiene una estrategia de continuidad para la siguiente generación 

Otro requisito de una empresa familiar es el de mantener una estrategia de continuidad, es decir, existe una vocación para trasladar el patrimonio de la empresa a la siguiente generación.

Si cotiza en bolsa, los fundadores han de poseer derecho de voto 

En el caso de las compañías cotizadas en bolsa, solo se pueden definir como empresa familiar si su fundador, fundadores o parientes tienen en su poder al menos el 25% de los derechos de voto que les corresponden por el capital social. Es decir, la familia debe tener un poder suficiente como para continuar influyendo sobre la gestión y la dirección de la empresa. 

Ventajas fiscales dependiendo de la comunidad autónoma 

Las empresas familiares, dependiendo de su comunidad autónoma, también optan a ventajas fiscales como en el impuesto sobre el patrimonio (exceptuando en las participaciones o acciones sociales) y diversos incentivos.

En este sentido, hay que recalcar que grandes e importantes organizaciones españolas han nacido como empresas familiares, aunque es verdad que, debido al paso del tiempo y a otras circunstancias como la falta de sucesores o de financiación, la mayoría de estas empresas han tenido que adaptarse a los nuevos tiempos vendiendo algún porcentaje de su accionariado y cediendo parte de la gestión a personas ajenas a la familia. Seguramente te suenen ejemplos como El Corte Inglés, Mercadona, Inditex o Banco Santander, entre muchos otros. Juntas, estas compañías suman buena parte del producto interior bruto y dan trabajo a 10 millones de personas solo en España.  

ATRIBUTOS DE UNA EMPRESA FAMILIAR

• Poseen valores arraigados 

• Escasez de financiación 

• Falta de sucesores idóneos 

Ahora que conoces al detalle los requisitos y te has familiarizado con algunos de los ejemplos mencionados anteriormente para formar una empresa familiar, te describimos algunos atributos más sobre este tipo de compañías: 

Poseen valores arraigados 

Desde un punto de vista más positivo, las empresas familiares se caracterizan por poseer unos valores y una cultura muy arraigados dentro de la compañía. Además, otras de sus fortalezas son la proximidad con el cliente, la flexibilidad y la garantía para planear acciones a largo plazo. 

Escasez de financiación 

Por otro lado, una empresa familiar también se enfrenta a ciertas adversidades como la escasez de financiación, lo que puede derivar en una disminución del crecimiento, ya que en la mayoría de los casos, los propietarios ponen en juego su propio patrimonio y no hay apenas financiación externa que alimente a la compañía.  

Falta de sucesores idóneos 

Otra de las debilidades de este tipo de empresas, como ya hemos comentado antes, es la falta de sucesores idóneos para heredar el mando de la compañía. Aun así, las empresas familiares siguen siendo fundamentales para la economía mundial, ya que aportan aproximadamente un 50% al PIB de sus países.  

RECOMENDACIONES PARA GESTIONAR UNA COMPAÑÍA FAMILIAR:  

Por último, desglosamos algunas de las recomendaciones para gestionar una compañía familiar:  

• Mantener una buena relación familiar.  

• Demarcar los derechos, deberes y roles de cada miembro de la familia dentro de la compañía. 

• Redactar un protocolo que marque unas pautas de organización para la sucesión. 

• Asignar funciones dentro de la empresa en función de las capacidades y habilidades profesionales de los miembros de la familia, tal y como se haría en cualquier otra empresa no familiar.  

• Dividir el patrimonio familiar y personal para evitar confusiones.  

• Formalizar los órganos de gestión. 

• Proteger los valores y la cultura originales de la compañía. 

 

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