¿Cómo invertir en energías renovables?

El mayor reto medioambiental que nuestra sociedad tiene por delante es la transformación energética que deberemos llevar a cabo en los próximos años. No es un reto del futuro sino del presente. Y las economías del mañana se están edificando con diferentes planes que desarrollan una energía verde, ecológica y renovable. Avanzamos hacia un mundo más sostenible y en el que los recursos finitos no sean explotados hasta la saciedad.  

En ese camino hacia la sostenibilidad, las empresas son cada vez más responsables y adoptan planes con un enfoque ecológico. En esa línea han crecido las posibilidades de inversión en energías renovables. Descubre en este artículo cuáles son las principales opciones y qué pasos dar para invertir en energías renovables. 

INVERTIR EN ENERGÍAS RENOVABLES  

El sector de las energías renovables fue uno de los más castigados durante la pandemia y eso se reflejó en las acciones de las principales compañías ecológicas. Pero el interés por invertir en energías renovables se ha reactivado y los expertos creen que no será algo pasajero. La Unión Europea ha apostado por la transición ecológica en su plan de recuperación Next Generation invirtiendo en él uno de cada tres euros.  

Pese a todo, a la hora de saber cómo invertir en energías renovables hay que identificar las mejores oportunidades y basarse en la prudencia, utilizando una hoja de cálculo y estimando todas las situaciones diferentes que se pueden presentar, de la más a la menos optimista.  

Un inversor minorista debería tener cierto conocimiento sobre energías renovables y el primer paso sería adquirir o construir una instalación renovable para consumo propio. Eso supone una cierta gestión e ir conociendo las eventualidades que se presenten. Evidentemente eso requerirá tomar decisiones sobre el proyecto y una cantidad de dinero.  

Esa inversión también se puede realizar a través de fondos. Así se diversifica el riesgo apostando entre diferentes proyectos, aunque el inversor tiene un poder de decisión limitado. Eso sí, en este caso, el coste será mayor. Otra opción más económica sería apostar por empresas cotizadas del sector, que ofrecen una mayor liquidez con unas cantidades más accesibles para el inversor. Aquí las rentabilidades vienen marcadas por los resultados de los mercados financieros.  

Las plataformas colaborativas como Fundeen serían la opción más económica para ese inversor minorista. Con una inversión accesible para todos los bolsillos puede suponer una buena puerta de entrada ante la inversión en renovables.  

FONDOS DE INVERSIÓN EN ENERGÍAS RENOVABLES 

A continuación te dejamos algunas oportunidades del mercado. Se trata de tres fondos de inversión que apuestan por las energías renovables y que han tenido una buena rentabilidad en los últimos años:  

1. DPAM Invest B Equities Newgems Sustainable 

No es un fondo de energías renovables exclusivamente. En realidad, apuestan por un compendio de actividades y son empresas relacionadas con la ecología, el bienestar y la nanotecnología. Este fondo selecciona, analiza e invierte en sectores y compañías que son una apuesta ganadora de cara al futuro, porque están viviendo un boom de desarrollo (tecnología, ecología…). Los resultados avalan esta tendencia con rentabilidades superiores al 20% en tres años y por encima del 15% a cinco años.  

2. BNP Paribas Energy Transition 

Esta cartera invierte un 75% de sus activos en renta variable. Se centran en empresas que trabajan en la transición energética, en energías renovables y que buscan la eficiencia energética. Otras apuestas suyas son los transportes sostenibles y la construcción ecológica.  

3. JP Morgan Global Socially Responsible 

Es un fondo similar al de DPAM. En este caso, invierte un 67% en acciones ecológicamente responsables y ha obtenido beneficios superiores al 15% en los últimos tres años. En 2021 mantuvo su rentabilidad al alza, por encima incluso de los ejemplos anteriores. 

ALGUNOS CONSEJOS PARA PRINCIPIANTES 

El primer consejo parte del sentido común y ahí coinciden todos los expertos: antes de dar ningún paso en la inversión en renovables, hay que conocer el sector, sus riesgos y también los aspectos tecnológicos y financieros de los proyectos en los que se quiera invertir.  

En proyectos que están en fase de desarrollo se pueden obtener mayores rentabilidades y, como es lógico, se corren mayores riesgos. Si se apuesta por los proyectos conocidos como ready to build, que son proyectos más avanzados, se minimiza el riesgo, aunque este sigue existiendo.  

Otro aspecto que hay que valorar son las diferentes estrategias que tienen las compañías, lo desarrolladas que tienen sus comunicaciones o lo diversificados que tienen sus productos. Por ejemplo, si una empresa tiene una integración tecnológica en la que ofrece productos eólicos on y offshore, productos basados en energía solar, etc., será más sencillo que estos tengan un crecimiento más rápido.  

Y, por último, las inversiones se deben plantear a largo plazo y no esperar resultados inmediatos. 

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