Es una pena con lo grande que es la red de Display El viernes pasado, revisando la cuenta de un alumno, vi algo que se repite con demasiada frecuencia: la campaña de Display pedía a gritos que tirásemos la toalla. La campaña de buscadores presentaba una ratios admirables, con abundantes conversiones y a menos de 10€ cada una, mientras que la de Display sólo tenía una conversión y a casi 300€ de coste. No. Aquí se lucha hasta el final. No por cabezonería, sino porque el premio final es demasiado grande como para no darlo todo.
Este profesional del emprendimiento digital profesor de Digital Business en ICEMD, y de creación de startup ha querido compartir con nosotros tres tips, que desde su expertise ha de conocer todo emprendedor digital.
Desde finales de la década de los 90, con el desarrollo de las telecomunicaciones móviles y fijas, comenzó a crecer un gran número de compañías de base tecnológica e innovadora que, sirviéndose de estos desarrollos, crearon múltiples modelos de negocio. Si bien a principios del nuevo milenio se experimentó una gran burbuja, que estalló en la cara de inversores y usuarios, tras un período de adaptación y en el amparo de una nueva generación de consumidores, nos encontramos inmersos en una verdadera época de impulso y consolidación del fenómeno start up.
Cuando empecé a trabajar en marketing directo, hace ya unos 15 años, mi jefe explicaba un símil que se me ha quedado grabado. Te han invitado a un recital de música clásica. Enfrente tuyo tienes el piano de cola. El señor vestido de pingüino se gira hacia a ti y te da el programa de la velada para que elijas. Te da a elegir qué quieres que interprete. Tienes dos opciones. 1 La primera se trata de tocar la misma tecla durante un par de horas. Dong-dong-dong-dong-dong-dong… Eso sí, con un tempo y unos bemoles exquisitos. Dice que es muy vanguardista.