ESIC News
“La transformación digital es algo que tiene que ver eminentemente con las personas”
Que la transformación digital es un tren que ninguna empresa puede permitirse perder es algo ya sabido en el mundo empresarial, no obstante, las oportunidades para embarcarse surgen a cada paso. Ayer en el Campus de Postgrado de ESIC Barcelona más de 150 personas pudieron aprender varios consejos para liderar procesos de digitalización e innovación de la mano de Laura Gil, Directora de Transformación Digital de Damm, quien explicó el caso de la multinacional cervecera.
“Yo no tenía ningún background tecnológico cuando asumí este reto dentro de mi compañía”, explica Gil, recordando su experiencia previa en el área de finanzas y, posteriormente, dirigiendo la estrategia corporativa del grupo de restauración Rodilla. Así pues, el primer aprendizaje que quiso compartir con los asistentes fue el de que no se “auto-excluyeran” de los procesos de innovación digital y tecnológica en sus empresas por falta de formación o práctica. Para Gil, el training en habilidades digitales deber ser renovado cada poco tiempo, teniendo en cuenta la rapidez con la que surgen nuevos sistemas y herramientas tecno-digitales.
Durante su ponencia, la directiva de Damm quiso subrayar los muchos aspectos que entran en juego para el éxito, siempre en constante testeo, de la innovación empresarial. La primera fase del cambio ha de empezar poniendo al consumidor en el centro, asegura Gil, ya que su satisfacción es lo que marcará las líneas estratégicas a seguir y el orden de prioridades. A este respecto, insiste en que hay que dirigir los negocios hacia el “data-driven”, donde los datos de los clientes deben incorporarse a procesos de interpretación y medición constantes. “Lo que no se puede medir no existe… Y no se puede gestionar. Tampoco vale el «yo no lo veo», ¡hay que probarlo!”, afirma.
Para la CINO de Damm es fundamental considerar solo la estrategia a largo plazo: “En la transformación digital la estrategia es lo único que debe diseñarse a futuro, pero los proyectos siempre deben ser cortoplacistas, siguiendo el método de «lanzar y probar», del constante «ensayo y error»”. Al fin y al cabo, concluye, los resultados deben presentarse y ser positivos, o demostrar una tendencia favorable, de lo contrario la innovación se convierte en contraproducente.
Junto con el consumidor, Laura Gil tiene muy claro que la inclusión y formación de los empleados es un imperativo para sostener un verdadero proceso de innovación en el tiempo. Tal y como afirmó en varios momentos de la conferencia, “la transformación digital es algo que tiene que ver eminentemente con las personas y con un cambio de mentalidad”, mientras que sitúa a la tecnología como uno de los medios posibles para conseguirlo.
Por ello, considera que los directivos deben tener como aliados permanentes a los equipos de recursos humanos, con los que trabajar por la inclusión de todo el staff en los procesos de cambio, por la integración generacional y, bajo todo ello, por el desarrollo de un clima de trabajo donde tanto veteranos como millenials se sientan cómodos y partícipes de los planes corporativos. “La innovación que verdaderamente funciona es la transversal, aquella que consigue sumar esfuerzos entre todos los empleados, independientemente de las jerarquías o las funciones”, concluye.