Empresas no pertenecientes al sector financiero tradicional, las fintech, están utilizando la tecnología para proponer soluciones innovadoras que no solo ofrecen los servicios tradicionalmente asociados a las instituciones financieras, sino que los mejoran, con una visión totalmente centrada en la experiencia del usuario y sus necesidades. Poder adelantarnos al escenario financiero futuro se convierte en una necesidad imperiosa a la que dar respuesta.
Los nuevos modelos de negocio y las nuevas estrategias de marketing requieren la generación de contenidos a medida y una relación con el cliente totalmente personalizada. Además, la inmediatez de los canales online exige que estas actividades se realicen en tiempo real, en la escala de los milisegundos. Cada cliente es único y como tal queremos tratarle, por eso si tenemos un millón de clientes a los que tenemos que dar respuestas inmediatas, sólo una máquina será capaz de hacerlo. Este es el terreno de la Inteligencia Artificial y de la Computación Cognitiva.