ICEMD: Juan Carlos, en tu libro afirmas la existencia del Marketing de Resultados y explicas de una manera sencilla en qué consiste la afiliación y cómo hacerla más fácil. De manera resumida, ¿qué nos adelantarías sobre este tema?
“Bah, yo no hago banners, esto que me vas a contar no me interesa” Si has pensado esto o el socorrido “Los banners han muerto”, piénsalo dos veces. Podrías estar, como dicen los americanos, dejando un montón de dinero encima de la mesa. Cuando se creó el primer banner, seguro que a nadie se le ocurrió decir nada de lo anterior: consiguió un estratosférico 44% de CTR. Lo has entendido bien, de cada 100 personas que lo vieron, 44 hicieron clic. Era esta cosa:
Los padres tardones El economista Xavier Sala-i-Martin explicaba en La Vanguardia esta anécdota: Ocurrió en un colegio que, como en la mayoría, tenían el problema de que algunos padres llegaban 10, 15, 20 minutos tarde a recoger a los niños cuando acababan las clases. El director tuvo una idea, creó una “oferta”, en este caso desincentivadora. Para conseguir que los padres llegaran a las cinco de la tarde en punto les puso una tarifa por cada minuto de retraso. Si llegabas 15 minutos tarde tenías que pagar, 15 x 1€ = 15€.
Con poco o mucho presupuesto. Con cinco minutos mágicos o meses de trabajo. Con lo último en tecnología o con una aplicación gratuita. Con mucha o con poca gracia. Si tu negocio web resuelve necesidades, bingo. Todo lo demás, bluff. Miles de personas entran en Google cada día con un problema. Millones navegan por sites, foros y blogs con necesidades no resueltas. Están deseosos de desprenderse de su dinero a cambio de un problema menos.