Una nueva etapa del capitalismo revoluciona al mundo empresarial.
“Nunca ha sido más imprescindible para los CEOs tener una voz consistente, un propósito claro, una estrategia coherente y una visión a largo plazo. El propósito de su compañía es su guía en este entorno turbulento”.
Larry Fink.
La historia nos cuenta la evolución y revoluciones que se han producido en el sistema económico internacional. Cambios que han afectado en la forma de trabajar, en los comportamientos de los consumidores, en el enfoque empresarial, etc. Estos cambios van ligados al progreso tecnológico y al entorno.
Como ya hemos escuchado de forma asidua, nos encontramos en un entorno VUCA, donde todos estos cambios se producen de forma cada vez más rápida y con más graves consecuencias si uno no es capaz de adaptarse continuamente.
En los últimos años, se han producido diferentes hechos: la pandemia mundial, el confinamiento, la invasión de Rusia a Ucrania o la crisis de los suministros. Las continuas crisis han provocado que los cimientos de la economía hayan cambiado por completo. El sistema capitalista presente en el mundo tras la Segunda Guerra Mundial se está adaptando a las nuevas necesidades de la sociedad.
La economía debe perseguir un propósito más sostenible y que satisfaga a los distintos grupos de interés, también llamados stakeholders. Tanto gobiernos, como grandes empresas asumen este asunto como una realidad actual. Por ello están haciendo esfuerzos por adaptarse a ella.
No obstante, las pequeñas empresas y autónomos deben de adaptarse también al cambio. Su misión debe ser generar un impacto positivo dentro de la sociedad y del medioambiente, es decir, perseguir un objetivo cuya misión debe de ser integrarse dentro de la sociedad para aportar valor.
No basta solo con tener rendimientos económicos y satisfacer a tus clientes.
Esto no debe ser un obstáculo que hacer frente, si no, debe ser entendido como una nueva oportunidad que tienen las empresas para prosperar en el entorno que nos encontramos.
Si un modelo de negocio consigue aportar valor a la sociedad, a sus clientes, proveedores, socios, empleados, etc. Y además permite generar beneficios económicos, será capaz de prosperar dentro del nuevo capitalismo consciente.