La necesidad de pacto social es cada vez más marcada en la sociedad actual. La polarización, la crispación y las marcadas diferencias entre los sectores de la sociedad no permiten una buena generación de sinergias entre las personas del país.
Aun con la necesidad actual de tener este pacto ahora mismo, parece que nuestros políticos no son capaces de ponerse de acuerdo. La crispación en el congreso y cada vez en más gobiernos autonómicos hace parecer imposibles la creación de un pacto social. Pero no es imposible.
El pacto social, cada día más cerca
Aunque parezca imposible, la situación actual terminará por generar la necesidad de este pacto social. Por esto, los políticos tendrán que ponerse de acuerdo, sean del color que sean y generar un pacto social.
Sin este pacto que incluya a todos, la sociedad en su conjunto no puede avanzar, y no podemos llegar a ser un país de pódium a nivel internacional. Pues la base para un gran crecimiento es una sociedad en buen estado, y la capacidad de generar crecimiento, finalmente acompañará al país.
Los grandes beneficios de un pacto social
Hay miles de pactos sociales que se necesitan actualmente, pero como nos han demostrado los países del norte de Europa, una de las grandes necesidades es el pacto por la educación.
Este pacto por la educación es prioritario, porque no podemos permitir cambiar nuestro modelo educativo cada cuatro años. Esto no es bueno ni para los docentes ni para el alumnado, que ve puesto en un aprieto la calidad de su educación.
El pacto por la educación
Un pacto por la educación sería un primer paso para el gran pacto de la sociedad. Una educación coherente y sostenible en el tiempo es indiscutiblemente necesaria. No podemos conseguir potenciar la educación si cada cuatro años se cambia la ley de educación: LOMCE, LOE, LOGLOE…
Por ello, la capacidad de la sociedad para llegar a un pacto, pasa por empezar por la educación, y acabar en el gran pacto social que necesitamos tan desesperadamente.