La polarización es un hecho que lleva presente en nuestro país desde hace siglos probablemente, pero si es cierto que en los últimos años la tensión y división entre la sociedad española ha ido aumentando debido a diversos factores. La cuestión es por qué se da esta situación que no aporta nada beneficioso para nadie (en principio) y si verdaderamente podemos hacer algo para cambiarlo y mejorar nuestras relaciones personales y profesionales.
El hecho de que nos encontremos en una sociedad polarizada no es algo que nos pille de sorpresa, pues llevamos mucho tiempo aumentando las divisiones de opiniones y pensamientos en muchos de los aspectos de nuestras vidas como gustos, aficiones, temas importantes o irrelevantes, política… y es un factor que hace de freno para avanzar como ciudadanos y personas. A esta situación, creo que se le han añadido, en mi opinión, dos factores potenciadores últimamente que han hecho que aumente la crispación y la sensibilidad frente a puntos de vista o preferencias diferentes a las nuestras y que llegan a provocar enfrentamientos que rozan la falta de educación y respeto, y son las redes sociales y el coronavirus.
Podemos sentirnos afortunados porque vivimos en una época en la que la comunicación y conexión entre las personas está mucho más desarrollada y mejor organizada que hace unos años debido a las RR.SS. pero por desgracia (y en parte por la naturaleza de algunas personas) esta herramienta de gran valor se utiliza como arma arrojadiza para aquellos que quieren volcar su odio envidia y frustración sobre otras personas de una manera muy cobarde (detrás de una pantalla) y hace que se aumente la tensión y el malestar social y por defecto se polarice aun más la sociedad. No sabemos verdaderamente el impacto que tienen las redes sociales en personas, empresas o países incluso, cuando escribimos un mensaje, publicamos una fotografía… y es un problema si se utiliza de la forma incorrecta, pero si fuese al contrario y se hiciese un buen uso de las redes sociales serviría para unir mucho mas a las personas, pues al fin y al cabo es su fin principal.
Y por si no estuviera ya bastante dividida la sociedad, tenemos que añadirle el ingrediente de moda en todas las conversaciones, la pandemia del COVID-19, la guinda del pastel de la polarización. Esta situación sin precedentes para todos los que estamos aquí hoy día, ha hecho que nos demos cuenta de lo que valen muchas cosas, pero por otro lado ha hecho que una mayoría global se sienta mucho más sensible a las opiniones y comentarios y se generen debates con opiniones muy diferentes, dos ingredientes que juntos son explosivos para crear un mal ambiente. Seguro que todos habremos escuchado discusiones de opiniones sobre medidas, mascarillas, vacunas, políticas… y es algo que puntualmente estaría bien, pero después de año y algunos meses de pandemia el desgaste se nota y hace que aguantemos menos ciertas cosas y sintamos que aumente esa división social.
Personalmente me parece un tema interesante y necesario de tratar, y creo que es algo muy difícil de solucionar de una manera eficaz, pues creo que se necesita la colaboración de todos para conseguir una meta común. Lo que, sí que es cierto, es que tenemos capacidad y medios para poder conseguir un pacto social y mejorar como ciudadanos y personas, y estoy convencido de que la enorme mayoría querría una sociedad sin polarización. Aun así, por desgracia siempre habrá agentes que impidan que esto pase porque les interesa una polarización social, por los motivos que sean (políticos, por ejemplo).