¿Avanzamos? ¿Hacia dónde lo hacemos? El actual sistema de capitalismo en el que vivimos, ¿es capaz de paliar las necesidades actuales? Con necesidades actuales, me refiero a por ejemplo, los Objetivos de Desarrollo Sostenibles, más conocidos como los ODS. Los sistemas económicos son como las sociedades, con sus recursos encuentran la forma de satisfacer sus necesidades, durante toda la historia, el capitalismo ha ido cambiando, modificándose y adaptándose a diferentes circunstancias, y ahora, no iba a ser menos, no hablo de un cambio de modelo total, sino de adaptar el modelo a la actualidad, actualmente son muchos los componentes de este sistema, empresas, proveedores, consumidores, etc.
Como he podido observar en el segundo On The Edge, la intervención de distintos ponentes, como, por ejemplo, Dña. Blanca Parejo, directora de la Fundación Alalá, el capitalismo puede adaptarse a una nueva forma, un capitalismo más social, la ponente citada anteriormente deja claro una opinión y es que es de vital importancia que las empresas privadas se comprometan para cumplir los ODS para así lograr un mundo mejor.
También, en este post, me siento obligado a realizar una breve mención a una gran actuación, a La Fundación Alalá, que tiene como principal foco paliar la exclusión en barrios como las Tres mil viviendas de Sevilla, pero, ¿qué es la exclusión social? Pues ni más ni menos, es la fractura de lazos con la sociedad, quedar apartado a un lado. Esta fundación trabaja para que Sevilla sea mejor ciudad, aún más. Para ello, Dña. Blanca también recalcó otra opinión con la que me siento muy identificado, ya que opino que es la herramienta a la que más uso hay que darle, se debe de tener prioridad el invertir en educación, ya que unos conocimientos básicos ayuda y encamina a la persona a llegar a algo, y por ende poder salir de la exclusión.
Por otro lado, D. Javier, otro ponente que tuvimos la suerte de escuchar, nos dejó claro su pensamiento desde un principio, y es que , los jóvenes somos el futuro, algo positivo porque parece que podemos estar más concienciados del peligro ambiental y esto hace poder prevenirlo un poco más, por ejemplo adquiriendo productos que son un poco más caros pero su producción son sostenibles y respetuosa con el medio ambiente, actualmente, se estima que un 66% de la población se compromete a pagar más por un producto sostenible, esa sostenibilidad se traduce en el valor añadido del Siglo XXI. También defendia D.Javier la importancia de premiar o reconocer a la persona o empresa que lo hace bien, a la que produce de forma beneficiosa para la sostenibilidad o a la que elige que producto comprar facilitando o promocionando ésta.
Por otro lado, me surge una pregunta a la que también soy capaz de responderme, ¿Tendremos suficientes valores los jóvenes para en un futuro formar a la siguiente generación? Pienso que sí, que tenemos esos valores, tenemos esas herramientas, lo único que falta es que seamos capaces de usarlas de forma óptima. En definitiva, nosotros, los jóvenes, somos el motor del cambio, debemos de actuar y cuanto antes lo hagamos, mucho mejor.