La Real Academia Española, define capitalismo como “Sistema económico basado en la propiedad privada de los medios de produción y en la libertad del mercado”, sin embargo, aunque esa es la definición oficial de este término, el capitalismo ha ido evolucionando históricamente, adaptándose a los cambios acontecidos en el mundo, e incluso puede cambiar entre unos países y otros, según el grado de libertad del mercado, por ejemplo. Este sistema económico, empezó evolucionar nuevamente desde hace un tiempo, fenómeno impulsado por la situación de pandemia, para dar respuesta y adaptarse a los problemas sociales del mundo.
El capitalismo existe desde que apareció el comercio, es decir, existe desde que existe la civilización, pero fue en el siglo XVIII cuando realmente se le dotó de importancia y se introdujo el concepto, mediante autores como Adam Smith, el Padre de la economía moderna. Este sistema económico favoreció la revolución industrial, pero las duras condiciones laborales, lo hicieron evolucionar. También, se vio obligado a cambiar con la gran depresión, adoptando nuevas ideas, como las de Keynes, quien demostró la importancia de la intervención del Gobierno para equilibrar los ciclos de expansión y recesión económica. Al final, es un hecho que el sistema cambia según cambian los tiempos. Pero ¿qué acontecimientos impulsan los cambios que se están produciendo en el sistema actual? ¿hacia que camino va el capitalismo?
Actualmente, el mundo se enfrenta a grandes retos; retos que requieren un cambio del sistema y, más que eso, un cambio en cada uno de nosotros.
Uno de los problemas de nuestra era, es el medio ambiental. La contaminación, la deforestación y la sobreexplotación de los recursos naturales, entre muchas otras cosas, han destrozado – y siguen haciéndolo – nuestro planeta, nuestro hogar. Por ejemplo, según los datos de la ONU, el 90% de la población respira aire contaminado (con la gran cantidad de problemas de salud que esto trae consigo, como asma, enfermedades cardíacas e incluso cáncer).
Por otro lado, el actual sistema nos ha llevado a un incremento de la desigualdad. Es más, esta situación ha empeorado con la crisis sanitaria.
Ante estos dos grandes problemas, la ONU no ha dudado en actuar y ha propuesto 17 objetivos de desarrollo sostenible (ODS), con el fin de hacer del mundo un lugar mejor. Estos objetivos, que pretenden ser cumplidos en 2030, impulsan este cambio en el modelo capitalista actual, ya que exige a las organizaciones a ser más respetuosas con el medio ambiente y a velar por la igualdad. Esto ha supuesto cambios en los modelos y estrategias de negocios y ya, muchas compañías, consideran algunos de estos ODS a la hora de planificar su estrategia e incluso los han considerado en su misión, visión y valores. En nuestro país, el 40% de las empresas que cotizan en Bolsa consideran estos objetivos, aunque solo el 20% mide sus acciones. Algunas empresas que lo hacen son: El Corte Inglés, Banco Santander, Meliá, etc.
Pese a que sus acciones pueden impactar positivamente en nuestra sociedad, aún queda mucho por hacer, como involucrar a las pymes, que conforman más del 90% del tejido empresarial español; e incluso que nosotros, como consumidores, apostemos por marcas socialmente responsables. La mejor herramienta, al final, para conseguir un cambio real es la educación, solo así, podremos ser conscientes de la situación y podremos tomar medidas.
En resumen, el nuevo modelo capitalista, debe ser más social, más humano, guiándose por los ODS y buscando lograr un impacto positivo real en nuestra sociedad. Estos cambios en el modelo deben darse tanto en las empresas grandes, medianas y pequeñas, como en los consumidores, quienes debemos informarnos sobre aquellas compañías que realicen acciones socialmente responsables, y apostar por ellas.