Día a día estamos viendo la importancia de estar preparados para tomar decisiones, desde la cantidad de aceite que le pongo a mi huevo frito, hasta el Master que elegir cursar al terminar la carrera.
La toma de decisiones en el día a día, una forma de innovación
La mejor forma de hablar de creatividad es mediante la técnica de P.I.S. además de que es un acrónimo fácil de recordar es una técnica infalible para tomar decisiones en el día a día.
Descompondré dicha técnica para hacer patente todo lo aprendido durante el curso de Harvard: Decision Making.
PIS para la toma de decisiones en el día a día
PROBLEMA
En primer lugar necesitamos un problema, un problema que podamos desmenuzar, explorar y sobre todo disfrutar del mismo en la medida que nos permita.
Descomponer el problema en sus diferentes partes es una parte potencialmente acorde al éxito de la resolución del mismo. En este punto debemos tratar de sacar el máximo de PROBLEMAS posibles, posteriormente sacaremos muchas soluciones para en un futuro.
Hay que analizar los «pain-points», funcionalidades, estética, ergonomía, cultural, inclusividad…
IDEA
La parte más divertida de este proceso de toma de decisiones, debemos abordar los diferentes problemas encontrados con creatividad y lanzarnos a disparar ideas que puedan solucionar el problema o sus partes.
Para abordar esta parte me gustaría recomendar la siguiente web: NEURONILLA, en concreto su apartado de técnicas. https://www.neuronilla.com/desarrolla-creatividad/tecnicas-creatividad/
Todas estas técnicas se pueden aplicar en la toma de decisiones del día a día
Se pueden observar diferentes técnicas para generar ideas, en grupo, a distancia, en solitario, co-creando, de manera más gráfica o más técnica.
En mi subjetiva opinión las mejores técnicas son las que están creadas concretamente para la sesión mediante gamificaciones. También es muy importante conocer a la audiencia y saber si el público está dispuesto a co-crear en el proyecto.
Herizont, es una empresa en Zaragoza que abandera este tipo de innovación disruptiva. Mediante dinámicas y mediante acuerdos comerciales que potencian las marcas a las que esta empresa ayuda.
SOLUCIÓN
Para elegir solución también hay una serie de técnicas creativas a las que podemos recurrir para encontrar la mejor solución a nuestro problema. Muchas de ellas se basan en filtrar, ponderar, segmentar o agrupar ideas. Una vez trabajadas las diferentes opciones
Lo más sencillo suele ser listar las mejores soluciones en una tabla, poniendo las ideas en las filas y lo que valoramos en las columnas, de tal modo que podamos puntuar todas las ideas conforme a los mismos criterios.
Poder tomar decisiones en el día a día con este método puede ser igual algo largo y engorroso, pero en el momento que comienzas la dinámica, se convierte en una inversión del tiempo muy rentable.
Seguramente en muchos casos de la toma de decisiones del día a día con una simple tabla de PROS y CONTRAS nos puede valer.
Sea como sea, lo importante, es tener una visión amplia, intentar mirar siempre con las gafas creativas, optimistas y sobre todo explorando opciones sin miedo.
Toma de decisiones en el día a día desde una mentalidad optimista
Son numerosos los estudios que demuestran que una visión optimista de la vida, nos ayudará a encontrar soluciones a problemas más facilmente así como a ser felices.
Leyendo el artículo de «DECIDIR O MORIR» he recordado a la psiquiatra Marían Rojas, la cual en su libro «Cómo hacer que te pasen cosas buenas» nos explica diferentes formas de ser felices, en particular, pensar desde el optimismo para conseguir objetivos.
Relacionar este con la toma de decisiones, podría dar para varios posts.
INNOVACIÓN EN EL DÍA A DÍA
La innovación y la toma de decisiones va muy de la mano, todo proceso creativo, comienza por una lluvia de ideas (o fase I del PIS), en base a esto podemos realizar diferentes innovaciones en cualquier proceso. La dificultad de realizar dichas acciones no está en la cuestión de la técnica sino en atreverse a tomarse este tiempo para innovar, tomar decisiones y ser lo suficientemente «estoico» para salir de la zona de confort.