Actualmente podemos hablar de la desigualdad en muchos aspectos de nuestras vidas, y por desgracia es uno de los problemas más arraigados en la sociedad que causa un gran impacto negativo, además de ser un freno para el avance en todos los campos a los que afecta.
En las últimas décadas hemos visto como poco a poco han ido saliendo muchos ejemplos de desigualdad a la luz (aunque llevasen presentes muchos más años) y gracias a esto se está consiguiendo combatir ciertas situaciones, de manera paulatina, y haciendo que la sociedad este mucho más concienciada de este problema. Para comprender mejor los antecedentes de un sistema desigual, hay que fijarse en la base de todo, la educación, si un sistema educativo de por sí ya favorece a la desigualdad, o no hace nada por evitarla, la sociedad comienza a construirse sobre unos cimientos mal formulados, lo que desemboca en problemas futuros mucho más serios y que generan un impacto notable, tanto en la economía, como a nivel personal, laboral…
En España la situación de desigualdad que se daba en nuestras vidas, se ha agravado más aún debido a la actual pandemia del Covid-19 que ha provocado un cambio de 180 grados en la vida tal y como la conocíamos. Desde que comenzamos la situación de pandemia en marzo del año pasado muchos sectores se han visto afectados de forma negativa y con ello la sociedad en sí. Una de las desigualdades más peligrosas que vivimos en la sociedad española y que se ha visto amplificada en estos últimos meses, es la económica, actualmente más de 10 millones de ciudadanos españoles viven con tan solo 16-24 euros diarios, lo que algo bastante llamativo pues hace poco más de un año la cifra no llegaba a los cinco millones de personas en esta situación.
Extrapolando la economía a niveles internacionales, la desigualdad que se está viendo estas semanas en relación a las economías mundiales y el sistema de vacunación es un hecho que deja claro que siempre los más fuertes (económicamente) serán los primeros, independientemente de la situación en la que se encuentre cada país, véase el ejemplo de Israel. Como un país donde la situación sanitaria está más controlada, ha conseguido a base de talonario hacerse con más vacunas que otros muchos países que tenían o deberían tener preferencia en este aspecto, simplemente por tener mayores recursos económicos y haber captado la atención y los servicios de las farmacéuticas.
La desigualdad es un problema globalizado que nos afecta a todos, tanto a nivel individual como de forma colectiva. Está en nuestras manos poder cambiar esta situación o forma de pensar/actuar, de un modo individual, es decir, el cambio tiene que nacer de nosotros mismos para poder aplicarlo en situaciones cotidianas o con otras personas. Pero sin duda alguna para poder ver cambios efectivos en el largo plazo, hay que hacer un gran esfuerzo en mejorar la educación de los niños y jóvenes, para inculcar unos valores que ayuden a mejorar la sociedad y evitar grandes problemas como es la desigualdad.